Aquellos días

 

Con esto del covid19 se siguen tomando nuevas medidas restrictivas y eso a las Maris no les gusta nada pero tienen que acatarlo. Hoy es el último día que de momento van a poder tomar un té juntas, así que se dirigen a la tetería de turno dispuestas a echar la tarde, toda la tarde, y por si se les acaba la conversación se han llevado un parchís, una Oca y una lotería con bombo y todo. Lozana que es muy sana se pide un batido de frutas, Pérfida un chai, Angustiada que tiene problemas de próstata pide una infusión digestiva y Histeria que siempre está de los nervios un roiboo relajante.

- Ay chicas, vengo que no puedo más con el bicho este.

- ¿ Pero Histeria, que traes ahí ?

- Pues una oca, lo que me dijísteis. 14 kilos de oca

-¡ Ay dios santo que torpe es, no se entera de nada !

- ¿ Y ahora de que os reís ? ¿ No os dais cuenta que ya no puedo más con este bicho ?

- Dijimos el juego de la oca. El j u e g o,¿ lo pillas ??

- Si mujer, la esposa del parchís.

-¿ Pero que dices tú también, Angustiada ?

- Po eso, que la oca es la mujer del parchís

- ¿ Tas tomado hoy las pastillitas, guapa ?

- ¿ Las de la memoria ? No sé, no macuerdo

- Anda que estáis buenas vosotras. Que vejez me váis a dar las tres 

- Lozana, tú tranquilita que ya te llegará a tí

-¡ Ah !¿ pero la tontería se pega ?

- No, no se pega pero ya te llegará

- A ver... ¿ que van a tomar hoy mis Maris preferidas ?

- Lo de siempre que no está la cosa pa hacer experimentos

- Marrrrrchando.

Las Maris se ponen a contarse sus cosas como siempre : que si mi Antonio le tiene querencia al sofá. Que si mi hijo me va a volver loca. Que si mi Juanan ronca cada día más. Que si mi Antonio está buenísimo y nos queremos mucho....

Pero llegado a un punto en que la conversación no da más de sí, se disponen a sacar la artillería. La oca va de mesa en mesa picoteando lo que otros clientes han dejado. No se aclaran con las normas del parchís y Pérfida que siempre tiene hambre, se pasa la tarde comiendo fichas previamente mojadas en el chai. Ya solo les queda la lotería y para eso Angustiada se las pinta sola. Así puede seguir hablando mientras saca cada bolita. El quince : la niña bonita, el veintidós : los dos patitos, el noventa : el más viejo de la venta....

- Angustiada,¿ no puedes decir los números sin tanta parafernalia ?

- Si Pérfida pero no me da la gana que ahora me meto en mi casa y no tengo con quien hablar.

- Chiquilla es que en decir tres números hemos tardao una hora 

- Po taguantas.

-¿ Y a tí que te pasa, Histeria ?

- Que me tomao el roiboo relajante y me está entrando un sueñecito mu güeno.

- Po ahora tienes que tirar con la oca pa tu casa.

- Ni me lo recuerdes que no veas lo que pesa.

Bueno Maris, no es por echaros pero tengo que cerrar que lleváis aquí cuatro horas pa diez euritos que voy a ganar.

- Ya es que no nos aguantan ni aquí

- Histeria, coge la oca. Lozana, tú con el parchís y tu Angustiada ve cantando la lotería camino a casa.

-¿ Y tú, Pérfida ?

- Yo me voy con mi Antonio que me lleva a Caballito.