Que inritación tengo desde ayer. Resulta que me hicieron una oferta mu buena pa cambiar mi móvil que ya se había independizado de mí ( sin referéndum ni na ) e iba por libre escribiendo lo que le daba la gana. Pues bien, me fui tempranito a la tienda Orange y un chico, la mar de mono, me pregunta que qué deseo; yo le explico lo que hablé por teléfono con su compañera y me dice que efectivamente hay ofertas y muy buenas. Po na, que me enseña el móvil y hace el amago de dar la charla por finalizada . No hijo no, le digo asombrada, tu me lo tienes que poner operativo que yo pa estas cosas soy pelín torpe. A ver , deme su correo y contraseña ( que iluso el pobre ) me dice con una inocencia casi infantil, y yo que sé, le contesto como ofendida, ¿ tu te has creído que yo tengo cabeza pa to ?. Ahí lo dejé un poco tocado. En fin, algo azorado, empieza a meter claves y datos en su ordenador y me dice cuál es mi clave. ¡ Que apañao eres !, le digo. Y las horas van pasando y allí se mascaba la tragedia así que le digo que voy al Mercadona por unos mandados mientras él termina. Vuelvo al cabo de un ratito considerable y ya, al muchacho, los dedos se le hicieron huéspedes, no daba una. Con mucho trabajo y devoción me entregó el móvil a la vez que me decía: para cualquier cosa aquí tiene a mi compañero porque yo me voy a dar de baja por depresión y ansiedad que vd es la gota que ha colmao mi vaso.
martes, 30 de julio de 2024
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