Cuando la melancolía me clava sus garras en el pecho voy derecha a mí habitación, cierro la puerta y me despojo de los años; busco con desesperación dentro del armario la cajita de madera ya ajada por los años y saco tus cartas. Hubo un tiempo en que una paloma cargada de palabras de amor me visitaba un par de veces por semana y aquello era mi sustento.
martes, 18 de febrero de 2025
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Mi ritmo justo
E ste año mi ritmo de lectura ha bajado notablemente, sin embargo, mi vida social ha aumentado en la misma proporción. He traspasado mis m...

-
Ayer anduve por nuestros lugares. Me senté en nuestro banco y miré el mar por las dos. Sentí que de nuevo estabas a mí lado cogiéndome la ...
-
Esta tarde, después de comer, he cerrado un rato los ojos y he tenido un viaje astral. Juanan que es muy prosaico dice que solo me he do...
-
V enid, hermanas, venid Os necesito He vuelto a caer y yo sola no puedo con este peso He llorado lágrimas secas, vomitado sollozos mudos d...
No hay comentarios:
Publicar un comentario