El viernes nos toca hacer la compra para la semana. Entramos en el super y cojo mi super carro. Voy por los pasillos saludando a las chicas que ya me conocen y a algunos clientes que son del barrio y también nos conocemos. Estoy eligiendo la fruta y de pronto oigo un aullido atroz y miro pero ya sé lo que me voy a encontrar: Juanan ha visto el precio de las sandías y se ha partío la camisa como Camarón. Yo me agacho detrás del carro y me pongo a buscar nada en las estanterías más bajitas y pienso: madredelamorhermoso cuando vea que el aceite de oliva ha vuelto a subir. Ahora veo que está en la carnicería, ha pasado por la pescadería sin mirar siquiera, y ya la cara se le empieza a poner de color verde aceituna cuando ve el precio de la carne. Cada vez le queda menos ropa, ha crecido un metro y tiene músculos hasta en las pestañas. Cojo lo indispensable. Al atún ni me acerco y ya me voy pa la caja seguida de ese monstruo verdoso y con la ropa rota en que se ha convertido Juanan. La gente me mira con conmiseración y nos dejan el primer puesto en la cola con tal de que nos vayamos pronto. Y ahí que vamos, como cada viernes, con la compra de la semana.
viernes, 18 de agosto de 2023
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Corazón roto
De pronto, Lucía escuchó un crack aterrador, le pareció que todos los cristales del mundo habían estallado. Miró a su alrededor y se s...

-
Como cualquier tarde entro en casa pero hoy noto algo especial, ya lo sé, hoy solo es casa y no hogar. Huele a vacío y soledad y hasta a m...
-
V enid, hermanas, venid Os necesito He vuelto a caer y yo sola no puedo con este peso He llorado lágrimas secas, vomitado sollozos mudos d...
-
A mis casi 66 años he asimilado muchas cosas: mis arrugas, mi flacidez, mi celulitis, mi memoria cada vez más frágil... Pero lo que no termi...
No hay comentarios:
Publicar un comentario