Declaración de intenciones

 

Cuando dices todo lo que tienes que decir, con respeto y educación, por supuesto, te quedas  como si te hubieras limpiado las tripas. Te tiras media vida intentando no hablar para no hacer daño y te lo vas guardando todo hasta que el daño te lo haces tú y tienes una perforación de vísceras por donde sale toda la mierda que llevas dentro. No es culpa de nadie como se toma la otra persona lo que le estás diciendo, reitero que siempre con educación, y si sienta mal pues que siente que bastante llevas aguantado ya. Pero claro, eso suele pasar cuando tienes acumulada cierta cantidad de años y experiencia, cuando te importa ya una higa lo que piensen de tí , y cuando tu salud mental y emocional va por delante de todo y de todos. A mí no me gusta el sincericidio porque no veo bien eso de ir soltando por ahí lo que piensas sin ton ni son, pero, oye, que te lleven media vida dando por saco y tú sin levantar la voz por evitar ciertos enfados pues como que no. Y en esas estoy, en lo de ir poniendo límite a ciertas personas y circunstancias para delimitar mi espacio vital y que no me coman el terreno. 

El romanticismo de hoy en dia

 

Tarde de octubre , calor y convalecencia.  Escucho música de ayer y de siempre : Los Panchos cantando boleros. Las letras me llevan a un pasado tan pasado que no llegué a vivirlo. Los hombres se esforzaban por enamorar a sus amadas con temas dulces, sensuales y complétamente blancos ( sin connotación sexual ninguna ). Y yo que como ya sabéis cuando me pongo en plan pensante, pienso y mucho, traslado esos aires románticos a la época presente y solo puedo aludir al reggaeton como expresión más sexual que sensual del asunto amatorio. Para que una chavala se quede prendada de un menda solo tiene este que cantarle una canción ( reggaeton ) en el que le diga unas cuantas veces: menea el culo so guarra que esa cosita es pa mi. Y oye, que a la chavala le gusta, le parece el asunto de lo más romántico. Me la imagino hablando con las amigas: eh tía, me ha dicho que me quiere. ¿ Y como te lo ha dicho ?. Porque quiere mi culito sabroso y eso es toda una declaración de amor. Joooo tía, que suertuda eres.

Por esta y algunas cosas más creo que soy de otra época. Me hago mayor y visto lo visto, me alegro.

Esta Maruja no tiene remedio

 

Ay Maruja menos mal que mas llamao... Na, que estaba tratando de echar una cabezailla después de comer y me entero por la ventana que a la Sofi la tienen que operar el escafoides o algo así... Y yo que no sé lo que es eso pero ella andaba mu preocupá porque le están buscando un hueso de no sé donde pa ponérselo... Y claro, ella dice que to los huesos que tiene los usa y así pa desprenderse no tiene ninguno... Ah y algo de la rodilla también... Mujer, yo lo que he escuchao... Hablaba bajito con la madre y no voy a asomar la cabeza pa decir que hablen más alto... Po eso, que la pobre ya tiene pa rato... Ahora se tira un año coja y lo del escafoides ese que no sé dónde lo tiene... Imagino que por dentro... Yo nunca he oído que nadie diga " que escafoides más bonito tienes " o " hoy tienes el escafoides fatal, a ver si te lo lavas, so guarra "... En fin, Maruja, que poquita cosa somos... ¿ Y tu pa que más llamao ?... ¿Otra vez?, ¡¡¡que pesá eres !!! Que yo no me meto en la vida de nadie... A mí no me gustan los cotilleos, me entero siempre de casualidad pero yo no voy a buscarlos... Así que cuando sepas si la del quinto sa quedao preñá me das un toque que yo ir, no voy a ningún sitio... Hala Maruja, con Dió.

El año en que fuimos ojos

 

El tiempo en que solo fuimos ojos... Ojos desorbitados, temerosos y a la vez curiosos ... Estuvimos huérfanos de esperanza, nadie sabía qué nos esperaba y mirábamos, mirábamos intentando ver el final sin conseguirlo... Hospitales, muchos hospitales llenos de ojos angustiados ... Gente sola que mira por la ventana intentando encontrar otros ojos... Calles desiertas de personas ... Naturaleza que recupera su terreno... Animales que ya no nos tienen miedo y muchos muchos humanos que cerraron sus ojos para no abrirlos más.

Cosas del Día

 

Ayer por la mañana me levanté como siempre y me fui derecha a la cocina a desayunar. Cuando llegué me di cuenta que no tenía pan, ni de molde, ni congelado, ni na de na, así que me puse un chándal tipo " Belén Esteban", unas gafas de sol tipo " Isabel Pantoja" y una gorra tipo " Paquirrín" y me fui al Día que tengo abajo de casa. Entré sin que me reconociera nadie y compré la barra de pan más grande que vi y ya estaba en la caja para pagar cuando entra un encapuchado pistola en mano diciéndole a mí cajera que le diera todo el dinero. Yo me enfadé muchísimo y le dije que esas no eran horas de ir a robar porque apenas habían hecho caja y además yo tenía prisa. Tanto gesticulé que sin querer le di con la barra en to la cara. El tío que se lo toma mal y arremete contra mí disparándome como un energúmeno, me parapeto tras la barra de pan y me hace un bocadillo de plomo. Me escondo detrás de los carritos con la intención de salir disimuladamente cuando entra la policía y dice: arriba las manos. Yo ya me hago un lío y levanto la barra de pan y al hacerlo se caen to las balas que lleva de relleno . El poli dice que yo soy cómplice y nos llevan a los dos al cuartelillo. El ladrón reniega de mí y dice que él nunca hubiera cogido un adefesio tan torpe como yo pa robar, cosa que me ofende pero me dejan libre. Salgo de comisaría y me dirijo a un coche patrulla que veo para que me lleven a casa. El policía se niega porque dice que acaba de limpiar el coche y se lo voy a llenar de migas y es entonces cuando me doy cuenta que aún tengo asida la barra de pan y no hay forma de soltarla porque del susto tengo agarrotada la mano. Paro un taxi y le digo que aunque no llevo un euro que por favor me lleve a casa. El pobre hombre me mira atentamente calibrando si soy peligrosa y me dice que tiene una carrera por allí cerca y me puede llevar dejándome donde mejor le convenga. Donde mejor le convino fue a tres kilómetros y tuve que cruzarme toda Málaga andando y con esa pinta. Cuando llegué a casa me eché a llorar y no por el trauma del robo ni el cansancio, no, sino porque me había dejado la leche calentándose y ahora se había quemado el cazo y la vitrocerámica era un desastre. 

P.D. llevo una semana comiendo pan porque aún no he podido despegar la mano de la barra.

¿ Amantes ? Naaaaaa

 

Ayer oí en la TV que tener un/a amante sale muy caro. Pero no dicen la pereza que da a ciertas edades. Cuando eres joven solo quieres aventura y probar, probarlo todo, pero a mi edad... uffff, pereza total. Yo, que llevo más de diecisiete años con mi pareja, mañana salgo a la calle y al doblar una esquina me da una ventolera y digo : me voy a echar un amante. Me apunto a una web de ligues y alguno se fija en mí o yo me fijo en él. Primera conversación: hola, y lo de " estudias o trabajas" lo cambiamos ya por " ¿ Cuanto hace que te jubilaste ? " Y así vas ya calculando la edad porque en el Tinder la foto que ha puesto es de cuando era un gurripato y si lo ves ahora no lo conoces. Después ya vamos a lo que interesa, a lo que tenemos en común: ¿ Lexatín o Tranquimazín ?, ¿ Artritis o artrosis?, ¿ Prótesis de cadera o de rodilla?. Vamos, un no parar de cosas. Y eso de no depilarte las piernas y tener los pelos como escarpias, nada. Tendría que ir más a menudo a Pilates y a la peluquería y a la manicura y a... Quita quita que yo ya no estoy pa eso. Y hablando de sexo ¿ Sexo ? ¿ Que es eso ?. Yo ya tengo rigor mortis en los bajos y no pienso resucitar nada pero vamos, ni " un nanosegundo en el metaverso". A mí lo que me echa pa'trás de un amante no es el dinero, es la pereza.

Las vueltas que da la vida

 

Mi vida es una vida normal, del montón, casi diría que anodina. Me han pasado cosas tanto buenas como malas pero ni unas ni otras se salen de la franja de la mediocridad. Algunos días son exactamente iguales a otros  y rebosan poca " vida ". Otros, con un poco más de actividad, tampoco llegan a romper la monotonía del todo. Cada vez quedan menos. La botella cada vez más vacía sin haber degustado bien el líquido vital. Algunas horas interminables, algunos días fugaces y otros con la sensación de estar metida en una rueda que no para de girar. Supongo que esto es vivir o sobrevivir o lo que sea, solo un trámite imprescindible para obtener el pasaporte hacia otro lado.

Show must go on

 

Soy una presa hidráulica. Por un lado sonriente y serena, la parte que ve la gente. Por el otro lado, aguantando la presión que hace sobre mí millones y millones de gotas. Gotas que son lágrimas que sujeto cada vez con más esfuerzo, gotas que cualquier día empezarán a resquebrajar la parte de felicidad impuesta y se abrirán paso por esta corteza inquebrantable hasta sacudir todos los cimientos. Gotas que al final caerán libres de ataduras y su caudal destrozará todo lo que tenga delante. Pero mientras tanto debo seguir con mi sonrisa idiota haciendo creer que todo va bien. Show must go on.

Otra vez pal monte

 

Estas Maris son la leche. Ahora les ha dado por hacer senderismo porque se han pateado tanto calle Larios para ir a tezzenis a comprar bragas que ya se creen expertas en esto de andar. Pero no contentas con hacerlo ellas, llevan a sus maridos aunque sea a rastras.

- Bueno,¿ hoy que ruta hacemos, Lozana ?

- A mí me da igual. Tirando pal monte lo que sea.

- Si ya, tu parte de cabra ya la conocemos pero Angustiada y mi Antonio se niegan a dar ni un paso más.

- ¡ Pero si acaban de bajar del coche !.  ¡ No hemos llegado ni a la entrada de la senda.!!

- Ya pero dicen que antes van a descansar un rato y a fumarse un cigarrillo.

- Po empezamos bien con estos dos.

- Que dice Angustiada que ella en su cinta anda divinamente y no le apetece ir monte a través.

- ¡¡ Pero con la cinta no llegas a ningún lado !!

- Me da igual Histeria. La cinta no tiene baches.

- Que no se hable más, que Antonio ya ha sacado su cervecita y se ha apoltronado en una piedra con respaldo que ha encontrado.

- Pero Antonio,¿ Quién me va a llevar a mi a caballito ?

- Mira Pérfida, hoy tu caballito está en huelga y me quedo aquí con Angustiada que por una vez tiene razón.

- Déjalo Pérfida que cuando Angustiada empiece a hablar este pega una carrera que nos deja atrás.

- ¿Tú crees, Histeria ?

- ¡Ya te digo !

- Mira por dónde van ya Lozana y su Antonio..

- Que fieras, apenas se les ve ya...

- Es que ellos están acostumbrados.

- Venga Juanan y Pérfida, ahora nos toca a nosotros demostrar lo que somos

- ¿Y que somos ?

- Po unos desgraciaos con ínfulas de senderistas.

- Vamos chicas que todo es empezar...

- Yo ya voy por el sexto

- ¿Kilómetro, metro... ?

- Paso.

- Acelera que la senda es tuya.

- Me cuesta mucho subir esta cuesta con mi díscola cadera.

- Ánimo Pérfida que tú voluntad es fuerte.

- Ya no puedo más. Aquí me planto a comerme mi bocata.

- Pero si estás a seis pasos de Antonio.

- Me da igual. Mi voluntad no llega a más.

Mientras tanto Antonio y Angustiada están divinamente en sus acomodos. Antonio se ha quitado la gorra y la ha puesto en el suelo. Cada conductor que encuentra aparcamiento le da las gracias y le echa un eurillo en la gorra, ya lleva más de cincuenta. De todas formas no está muy contento. Dice que este no es su medio natural, que no aguanta tanto aire puro. Para la próxima, si es que la hay, está pensando en traerse el sofá.

Lozana y su Antonio ya vienen de vuelta y cuentan maravillas de todo lo que han visto

- Chicas, la cima es preciosa. Unas vistas panorámicas estupendas. Venimos cargados de energía positiva.

- Bueno Lozana mía, yo también vengo cargado con la mochila y tu chaquetón.

- Si cariño pero tú eres fuerte y fibrao y yo soy una pobre chica enclenque.

- Déhate de rollo que eso ya no cuela. Pa la próxima nos traemos el carrito de la compra.

- ¿ ¡¡Pero en serio pensáis que vamos a venir a otra.!!?

- Por supuesto Pérfida. En la próxima darás por lo menos diez pasos y eso es todo un logro.

- Tú tas chalao. Yo os espero la próxima vez en el Curly's tomándome un té y que le den por saco a la naturaleza. ¿ A que sí, Angustiada ?

- Por supuesto, yo te acompaño.

- Pues a mí no me ha ido mal. He sacado más de cincuenta eurillos y sin traerme el sofá ni nada.

- Pues Juanan y yo si nos apuntamos a lo que sea.

- Di que sí, eso es valentía 👍

Vamos de ligue

 

Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia

Me encantan las películas románticas de ficción. Bueno, todas las películas románticas son ficción porque a ver: chica vestida para matar está sola en la barra de un bar... Y digo yo, imaginad que esta chica, señora o lo que sea está en su casa en chándal o bata de guatiné y dice: me voy a poner el vestido negro descotado, los tacones de agujas, me hago las planchas en el pelo y me pinto como una puerta para ir al bar de abajo por si viene algún buen mozo y me lo ligo. Y oye, que viene el mozo y le dice: te invito a otra copa. Ella todo confiada se toma la copa, se miran a los ojos y ya han ligado y viene eso de " en tu casa o en la mía". Por supuesto que en la de él porque así ella se puede ir cuando le dé la gana. Hacen el amor y los dos llegan al orgasmo juntos. Paaaa faaavaaaa, eso no se lo cree nadie. Después ella se levanta toda pudorosa y se enrolla la sábana porque ahora, después de una noche de pasión, le ha entrado la vergüenza. Eso sí, se levanta como una diosa, totalmente peinada y maquillada, sin legañas ni na y se va a la ducha adonde él la sigue para volver a echar un polvo que eso sí que es complicado porque en una buena bañera se podría pero en una ducha con mampara es complicadísimo y si tiene cortinas no te quiero ni contar pero ellos lo hacen con mucha clase y elegancia y no como el resto de mujeres que por lo general nos quedamos a dos velas sin orgasmo ni na, con el rímel corrido y los pelos de punta.

Ojos

 

Muchos ojos me miran, me escrutan y me desnudan... Los míos miran más allá, por encima de todos hacia el horizonte... Allí encuentro la libertad, el espacio infinito que necesito para poder respirar... Mi alma va tras mis ojos para volar libre y encontrarse con el vacío... Las miradas me achican, me hacen pequeñita y no me reconozco... Ojos que preguntan el porqué y yo no tengo contestación que los satisfaga por eso los cierro y vuelvo a mí introspección.

La playa en casa

 

Estos chicos ya no soportan el calor y Pérfida que es mas lista que el hambre, ha hecho unos arreglitos en el patio para tenerlos contentos. A parte de la ya famosa piscinita ha echado 20 kg de tierra para que estén como en la playa pero por lo visto, el invento no ha gustado mucho .

- Pero chico, ¡¡¡esto que es !!!

- Mi Pérfida que nos ha hecho aquí una playita 😁

- Pero si hace más de diez años que no voy y no voy porque NO ME GUSTA 😡

- No seas saborio, Juanan y siéntate en la arena. Toma un cubito y una pala 🤭

- ¡¡Ni cubito ni polla !!

- Ofú el yayo como viene hoy.

- Es que se me mete la tierra por sitios indiscretos.

- Po yo voy a aprovechar pa quitarme la camiseta y os enseño mi cuerpo to fibrao.

- A ver Javi, si sacas de paseo a tus músculos los demás no cabemos.

- Y yo me quito los calcetines.

- Ni se te ocurra, niño, que no quiero que me mates las plantas con tu olor

-¡¡ Pero si no hace ni una semana que me los lavé !! Hoy estamos exquisitos.

- Mira Jose otra palita y un cubito pa ti también.

- ¿Y donde están las brujas ? ejem...... las chicas.

- Po dentro tomándose el té tan ricamente con el aire acondicionado puesto.

- Yo esto lo veo un poco raro.

- ¿¿Raro ??

- Si. Esto de que ellas ahí fresquitas y nosotros aquí a pleno sol.

- Es que no quieren que las oigamos

- ¡¡¡A saber lo que están cascando de nosotros !!!

- No hombre, es solo que les gusta hablar de sus cosas.

- Javi, emanas inocencia.¿¿¿ Tú te crees que estas cuatro no están hablando de nosotros ???

- Estoy seguro que mi Lozana solo habla bien de mi 

- ¡¡Este es tonto !!

- Ninguna mujer habla bien de su pareja.

- Bueno, mi madre no es mi pareja así que hablará bien de mí.

- Ay gorrión, que iluso.

-¿¿ Y si vamos despacito y nos asomamos a ver que dicen ??

- Vamos.

- Pero en silencio, eh ! 

- Pues sí Pérfida, mi Juanan es un bulto con patas. No me sirve pa na.

- ¿¿Y que hace en la cama ??

- Dormir, roncar y peerse 😁

- Eres una santa, Histeria.

-¿¿ Y Javi ??

- Aún estoy esperando que haga una frase completa. Habla como en Morse.

- Po a mí Antonio lo tiro de lao en la cama y amanece de la misma postura.

- ¿Y Jose ?

- Esa histérica me tiene hasta el toto. Un día lo ajogo !!

- Somos unas santas todas 

- Ya te digo.

- Madre mía lo que cascan de nosotros.

- Si y na bueno.

- Y tu Juanan, ¿es verdad que te pees tanto ?

- Hombre yo dormido no me doy cuenta.

-¿ Pero lo haces dormido de verdad.?

- No, es pa vengarme 🤣

- Que cabrón. Esta noche se lo hago yo a la mía.

- Y yo.

- Si, es la única venganza que nos queda 🤭

Fusilamientos

 

Lo sacaron de su celda al amanecer como hacían siempre con los que iban a morir y por eso cuando ya estaba junto a la tapia del cementerio se negó a que le taparan los ojos, quería quedarse con esa última imagen del sol apareciendo por el horizonte. Un disco de oro puro como una joya única que luce en el pecho de una doncella. Y así mirándolo fijamente se fue deshecho en sangre y regando aquel trocito de tierra que mañana regarían otros.

Besos

 

No lo llames beso si no lo das con pasión. Llámalo unión de labios o de lenguas o incluso intercambio de fluidos pero los besos son los que se dan poniendo el alma, cuando toda tú te deshaces en ello y los átomos del cuerpo se vuelven locos y ya no saben a quien pertenecen.  Un beso es algo culminante que dice muchas cosas, no miente, no escatima amor. Se da y se recibe a la vez porque es la comunicación perfecta

Cuando la montaña te atrapa

 

Siempre me habían dicho que aquella montaña era traicionera y sin embargo me atraía como una amante generosa. No sé por qué aquella mañana, tan temprano, decidí dar el primer paso, después otro y otro más. Noté como mis pulmones se ensanchaban y la sangre me saltaba alegre en las venas, hasta que sentí que una mano dura como una roca me aprisionaba el tobillo. Intenté resolverme y soltarme pero con cada intento más partes de mi cuerpo se volvían rocosas y duras.  Llegó un momento en que toda yo fui parte de ella y comprendí por qué era tan traicionera, porque aquella montaña se nutría de personas a las que su belleza natural atraía como moscas a la miel.

Ruptura

 

A los 20 años conoció el desamor de una manera brutal, decidió que lo mejor era poner tierra de por medio y se alistó en el ejército. Decidió que poner distancia le iría bien sin contar con que la llevaría en el recuerdo aún sin querer. Que los amores se agarran al alma y no la sueltan con la distancia. Con el tiempo conoció a otra, no era igual pero sí la que más se parecía a ella. Se casó o lo casaron, nunca lo supe, pero el día de la boda estaba desesperado, quería que algo pasara, algún imprevisto que lo anulara todo, pero nada ni nadie vino en su ayuda. Ese amor perdido le agarrotaba el corazón. Quizá hubiera sido el momento de decir NO pero quién calla otorga y él otorgó. Pasaron los años de misiones en otras tierras. Tuvo dos hijos y cada vez la soga apretaba más. Ahora siendo padre era imposible irse pero a la vez la paternidad fue su tabla de salvación.

Un día, quince años después, la volvió a ver. Esas piernas que se aflojan y ese sudor nervioso que no cesa. Apenas le salía la voz cuando se saludaron y lo peor fué ver que ella estaba bien, que no lo había echado de menos. Estuvieron hablando una hora, allí de pie en el pasillo de un supermercado. Ella se acababa de separar de su marido pero se la veía feliz. El seguía con su soga al cuello y con solo mirarla quería empaparse de quince años de ausencia. Desde aquel día se aprendió todos sus movimientos : cuando entraba, a que hora salía, donde trabajaba, cuando hacía la compra... Todo por poderla mirar aunque fuera de lejos. Un mirón de vida ajena. Aquella que quería que fuese la suya.

Comentario de texto

 

Es así Víctor, siempre he sabido que eras un poco voyeur pero no hasta que punto. Empezaste espiando a Victoria, aquella puta que creías que era tu ex y aún sabiendo que te habías equivocado la buscabas de noche en las esquinas. Más tarde lo de Marta fue muy fuerte. Dejarla morir mientras solo mirabas por miedo a llamar a una ambulancia y que se enterará su marido de lo vuestro; sí, muy fuerte y eso que tampoco había sido para tanto. Y allí te quedaste también mirando a Eugenio, su hijo, durmiendo sin saber lo que había pasado. Y ese morbo después por conocer a su marido y a su familia me parece insano. No es normal , acéptalo, eso de ir persiguiendo a las personas para meterte en sus vidas con calzador, no es de recibo y después ir siguiendo a Luisa, hermana de la fallecida Marta, hasta enterarte de sus más bajos sentimientos dice muy poco de tí. A no ser que por tu profesión de guionista necesites material para escribir. Pues eso, que cuando empecé a leerte no pensé que la cosa iría por aquí.

Mañana en la batalla piensa en mí y cae tu espada sin filo ; desespera y muere.

Ricardo III

W. Shakespeare

Cuatro locas del coño

 

No os lo vais a creer pero las cuatro Maris han quedado para hacer una ruta de senderismo, nada más y nada menos que en la sierra de Casares. Allá que van con un bocata tortilla y una coca cola en la mochila.

- Ofú, esto tiene mucha cuesta

- Venga ánimo que ya queda na pa empezar la ruta 

- ¿ Pero Lozana, es que esto no es ruta. Sí llevamos media hora andando ?

- Me temo que del hotel aquí solo hemos andado veinte metros.

- Po yo me voy a fumar un cigarrito.

- Yo te acompaño, Angustiada.

- Vamos chicas que aún nos queda ocho kilómetros.

- ¡ Que dices loca !.

- A mí que me convaliden está cuesta que ya no puedo más.

- Es que no te cuidas, Pérfida.

- Y si tengo el culo gordo ¿ Que quieres que haga ?

- Mujer, cuidarte. Mira Histeria por dónde va ya...

- ¿ Pero Histeria que lleva delante ?

- Se ha colgado el bocata del palo selfie

- Como le ponen la zanahoria al burro.

- ¡Que lista es la jodía !. Ha fijao la meta en el bocadillo de tortilla.

-¡¡ Vamos chicas que vosotras podéis !!

- Lozana, tú tira pa'lante que nosotras nos quedamos aquí en la plaza. Mira que bar tan cuqui y el camarero tiene cara de buena persona. Seguro que nos da conversación.

- Pues aquí os dejo. Yo me voy con Histeria que seguro que anda ya por la provincia de Cádiz.

- Pues nada Angustiada, nosotras aquí tan ricamente.

- Di que sí Pérfida que a estas dos la dao por la vida sana y no hay quien las pare. ¿ Otro cigarrito ?

- Po claro y lo que haga falta y a tomar por culo la vida sana. Mira a las dos cabras por lo alto del monte.

- Ay Lozana, yo no puedo más

- Venga Histeria que ya queda poco pal bocata de tortilla.

- Si es que por más que ando no lo pillo. 

- Esa es la idea. Así andas sin darte cuenta.

- Pero es que ya he perdido hasta el resuello.

- Bueno pero lo que no hay que perder es la moral

- ¿ Moral ? Eso lo perdí hace diez kilómetros

- No, tú perdiste el morral cuando se te cayó cuesta abajo.

- Si, eso también y la moral, que te lo digo yo.

- Bueno, pues volvemos que ya llevamos una buena andada.

- ¿ Me puedo comer el bocata ?

- Si mujer, no te vaya a dar un parraque y tenga que tirar de tí.

- Aaahhh que buena idea. Lozana creo que me estoy mareando. Llévame a caballito que no llego.

- Po ahí te quedas que yo me voy.

- ¡ Pero que hija de su madre la pelos locos esta !. Esperameeee que ya estoy mejorrrrr.

- Angustiada que bien estamos aquí las dos en la placita del pueblo.

- Po vete levantando que ma dicho el camarero que ya estamos tardando.

- ¿ Pero eso a que viene ?

- Que dice que llevamos tres horas sentás y solo hemos pedido un vaso de agua y dos pajitas.

- ¿Y la alegría de tenernos aquí con qué se paga ?

- Supongo que con dinero.

-¡  Será saborío el tío !. Espérate que le voy a decir dos cosas: 1* que me traiga una servilleta y un palillo de dientes y 2* que aquí no volvemos más.

- Digo y dos buenas clientas que ha perdío !!

- ¿ Que, Angustiada, subimos al castillo ?

- Ni de coña. Yo me voy pal hotel.

- No esperaba menos de ti.

Cosas de la tele

 

Hola Maruja, que bien que me has llamado porque estaba yo viendo el firdey y estaba aquí pensando y hablando conmigo misma que hay que ver la gente que va a estos sitios... Mira, una de nuestra edad, más o menos, que va buscando una cosita así parecía a Carlos Sobera... Si Maruja, es que es una monería de hombre... Cucha y no me interrumpas... Po como te digo, va buscando un Carlos y le han puesto un pimpin que le llega a la cintura... Yo me parto... No, por él no, que cada cual es cada cual y seguro que el muchacho es un bendito... Pero cucha, los que hacen las parejas ya podían tener un poco de más tino que los pajaritos se les van todos... Y encima el muchacho lleva una medalla de no sé qué que la ganó en la mili... Si, cuando Franco era cabo... Ay Maruja que me meo toa... Que la otra sa creío que era militar y cuando lo ha visto y la dicho que es cristalero se lan caío las bragas... La gente es mu rara, Maruja, y se apunta a to con tal de comer gratis... Y tu ¿pa que más llamao ??... ¡¡¡Yo que voy a saber na de la del quinto !!!...¿¿ Pero tú tas pensao que yo soy una cotilla ??... En la vida me verás criticar a nadie... Hala, hasta mañana que no son horas de estar hablando por teléfono...

Mi clase de Yoga

 

El otro día estábamos esperando para entrar a clase de Pilates las mismas desgarbás de siempre: Karina, Charo, Ana, Carmen, Manoli, María y yo y vino la profe y nos suelta : hoy en vez de Pilates vamos a dar una clase de yoga de lo más facilita. Al principio nos miramos con cierto desconcierto y cuando ya íbamos a echar a correr Conchi se nos adelantó y cerró la puerta con tres candaos. Nosotras que somos unas señoras de lo más decididas y viendo que la puerta estaba bien custodiada, nos metimos en clase. Al principio todo fue maravilloso porque podíamos respirar sin ponernos azules. Nos miramos unas a otras como diciendo " pero si esto es mu fácil, esto está chupao pa nosotras que ya entramos en la categoría de expertas ". Ah qué ilusas fuimos. Ana la profe se sentó en la yogamat y empezó a hacer torsiones con la pretensión de que la siguiéramos pero eso no nos amilanó y tanto nos retorcimos que aquello parecía una caja de tornillos a rosca. ¿ Ahora que hacemos, profe ? dijo Karina presumiendo de que ella lo llevaba divinamente. María que se toma diez cafés pa venir a clase con energía, se nos pasó de rosca y tuvimos que usar la llave inglesa pa enderezarla. Carmen que le había pillado el oído sordo y no sabía que ya estábamos con las asanas seguía con un monótono Omm que retumbaban las paredes y cuando abrió los ojos y nos vio a las demás con la cabeza dando vueltas como " la niña del exorcista" se plantó de rodillas a rezar diciendo " vade retro Satanás" que estas son mis amigas y yo las defiendo.

Esa solo fue la primera postura, para la segunda teníamos que meter la cabeza entre las piernas a la vez que con cada mano hacíamos bailar unos platos chinos y con la cintura un hulahop. No me parece muy serio esto - dije -porque así no me puedo relajar y yo siempre he leído que el yoga relaja mucho y a mí me está dando ansiedad. Es que a la vez tienes que hacer la respiración abdominal y pensar en el pranayama - dijo la profe tan pancha -. Yo ya no podía más y me quería ir a mi casa a llorar pero Conchi seguía custodiando la puerta como el can Cerbero y no había forma de escaquearse. La clase terminó a su hora, ni minuto antes ni minuto después, pero con tres ambulancias en la puerta y un herrero para enderezar a María, Charo y Ana que se quedaron algo perjudicás de la espalda y parecían la carretera de los montes. Todo con mucha clase y elegancia como siempre

Palabras

 

A Jaume Plensa por su inspiración 

Las palabras que decimos se quedan en el aire esperando que alguien las recoja y las adopte. Huérfanas de vida, se enamoran de otras palabras, se unen y hacen el amor entre ellas. Nacen nuevas palabras y se reproducen y se ensanchan. El universo está lleno de palabras dichas y no escuchadas que buscan y no encuentran descanso. Vuelan con las aves, nadan con los peces, conviven con las personas pero estamos muy ocupados en otras cosas y no las sentimos. Cuando no están sí las echamos de menos. Los oídos sordos y las bocas mudas luchan por atraparlas de alguna forma y no lo consiguen . El día que las palabras se vayan los huérfanos seremos nosotros.

Azul mediterráneo

 

Me gusta mirarte desnudo con tus venas azules pintadas en la piel como un tatuaje de símbolos cabalísticos. Tu cabeza ya con el pelo cano como tú barba sigue siendo egregia y elegante como un cuadro en el marco gótico de un museo. Tu torso amplio donde apoyo mi cabeza para oír el reloj de tu vida que aún se acelera cuando me acerco. Tus brazos acogedores en tiernos abrazos. Tus ojos de un azul mediterráneo que me miran con ternura y me hacen grande y joven de nuevo. Tus manos que saben acariciar mi alma. Todo tú me sigue asombrando porque cada eres diferente y lo diferente siempre es interesante.

Soy yo, Satán

 

Y llegado el día me echaron a la vida... La luz se me clavó como un puñal en cada ojo, los sonidos eran como gritos aterradores, el frío inmenso y mortal... Supongo que no tenía más remedio que nacer porque había llegado mi tiempo... A los pocos días casi me había acostumbrado a todo y es cuando me cargaron con una peso excesivo para mi corta existencia... Me pusieron un nombre, Elena, pero enseguida me llamaron Lena... Ese nombre como un tatuaje hecho a fuego es el que llevo desde entonces a todos los sitios y en todos los momentos. Ya no soy nadie, solo un nombre o quizá sea ahora cuando sí soy alguien porque me han nombrado... Fui creciendo poco a poco o mucho a mucho según como se mire... Me fui haciendo a lo que llaman" costumbres " y fui aprendiendo a andar, hablar, socializar y todas las cosas propias de cada etapa de la vida... Recuerdo bien como mis supuestos padres se asomaban a mí cuna creyendo que dormía, yo de pronto abría desmesuradamente los ojos y los miraba con fijeza... Ahí ya empezaron a sospechar que yo era diferente, que no era una niñita normal... Cuando fui creciendo me gustaba mucho contemplar el fuego... Iba gateando hacia la chimenea y me paraba frente a la puerta transparente a mirar fijamente las llamas y que a mí me parecía un extraño baile de seres diabólicos... Cuando ya aprendí a andar me gustaba levantarme de la cama y acercarme al cuarto de " mis padres "... Me quedaba mirando como dormían tan plácida y confiadamente... Después volvía a la cama y me quedaba con los ojos fijos en el techo lleno de estrellas pintadas ... El paso siguiente fue entender todo lo que oía. Ellos no podían imaginar que mi cabeza ya tenía un plan para deshacerme de ellos y yo disfrutaba mi silencio... Así seguí creciendo y desarrollando mi plan, ellos decían que cosas que hacía como clavarle a mí hermano un tenedor en la espalda o meter a mi hamster en agua hirviendo era cosa de chiquillos... Yo tenía la habilidad de mirar con total inocencia y no sospechaban... Una noche supe que era la definitiva. Habían dejado rescoldos en la chimenea y me fue muy fácil acercarlos al filo de las cortinas del salón y de ahí a la alfombra... Abrí la puerta de la casa y salí al frío intenso de la noche... En poco tiempo todo era una gran antorcha que relucía, sonreí y sentí la presencia de mi verdadero padre a mí espalda... Él es el grande, el amado... Él es Satán.

Mis clases de Pilates

 

Mi clase de Pilates es como una gran jaula con ocho cotorras dentro . Vamos y hablamos, hacemos abdominales y hablamos, hacemos glúteos y hablamos y así se nos pasa la hora. Este año nos ha dado, por indicaciones de la profe, por hacer Pilates acrobático. Imaginad a unas señoras en una edad delicada colgadas de unas cintas que penden del techo como si fueran murciélagos. Para eso previamente hemos estado tres meses sin cortarnos las uñas de los pies para tener un mejor agarre. Pues bien, el lunes pasado andábamos por las alturas cuando María, la más pequeña, no en edad sino en estatura, pegó un saleaso en el suelo. Aquello fue un visto y no visto, todos los huesos se desparramaron por el suelo. Enseguida vino Manoli apartando al personal y diciendo que aquello lo arreglaba ella porque estaba dando clases de mecánica de camiones. La miramos con un poco de duda pero vimos que se las arreglaba bien ( más o menos). Había huesos y órganos que no sabía bien donde ponerlos y todos se los echaba en to lo alto de la cabeza, hasta tal punto que María cuando llegó a clase medía 150 cm y cuando salió iba ya por 300 cm. No me pareció que se fuera mu conforme con su nuevo físico y solo decía: me falta una oreja, me falta una oreja, a lo que Manoli ya toda una ingeniera le dijo : ¿ Que más da si la tienes repetía y encima es mu fea ?. Así que hoy María no ha venido a clase pero a cambio nos han metido a Carmina, una señora que pasaba por la puerta con el carrito de la compra y sin saber cómo se ha visto de pronto agarrada al techo con las uñas de los pies y la cabeza colgando. Todo muy natural y con mucha clase, como siempre en nosotras.

Castañas calentitas

 

Aquí estoy, ya es mi tiempo, el mismo que todos los otoños. Hago guardia en esta esquina pero podría ser cualquier otra. La gente se comporta igual en todas partes, la mayoría pasa, algunas miran y muy pocas se acercan. Este año hace más frío de lo normal para esta ciudad que siempre brinda al sol. Las tardes se han acortado y todos van con prisa para llegar a sus hogares. ¿ Todos ? No, yo tengo que aguantar el frío y la lluvia aquí a pie firme. Tengo que terminar lo que he venido a hacer y mientras los demás disfrutan ya del calorcito que da una buena casa yo sigo con mi cantinela : castañas, castañas calentitas, ¿ quién quiere castañas asadas ?

Nubosidad variable

 

Mi cabeza ya no es mi cabeza, es más bien un remolino turbulento de materiales en suspensión. Nubes densas de pensamientos, recuerdos, proyectos de futuro con poco futuro. Me asusto y la conciencia y la consciencia se me confunden. De repente un proyectil me entra por el pecho y me traspasa pero no noto dolor. Me miro y solo veo un pequeño agujero del que sale humo blanco y pienso que eso debe ser la vida que se me va volando. Las piernas me flaquean pero no me caigo, consigo un equilibrio sinuoso que me sostiene. Los brazos son como de lana blandita incapaces de sujetar nada. Supongo que esto es lo último antes de deshacerme de la energía que me queda y que ya mismo será una con el universo.

Pobre Tamara

 

Ay Tamara, pobretica, no sabes lo que las mujeres nos identificamos contigo salvando las grandes distancias, por supuesto. Yo, por ejemplo, pasé por una cosa casi igual pero lo mío no fue público. No tenía los micrófonos esperándome en la puerta de mi casa. Fue algo como de andar por casa, nada que ver con lo tuyo que ha sido noticia en medio mundo. Un día cogió una maleta y me dijo: agur, que voy a comprar tabaco. Yo me mosqueé un poco porque el no fumaba y porque eran las doce de la noche, así que, le dije que por qué se llevaba la maleta y me contestó que iba a comprar varios cartones y así le sería más fácil traerlos. Me quedé toda la noche esperando y cuando vi que se había llevado gran parte de su ropa me dije : tate  que este no vuelve. Me tiré una semana sin quitarme el pijama y llorando a moco tendido pero después pensé que por lo menos nadie se había enterado ( ni  siquiera el Sálvame) y encima ya no tendría que planchar más camisas. Pero lo que te han hecho a tí, Tamara, eso no tiene nombre. Tener que dejar tu pisito tan mono para irte a " villa meona" a que te consuele mamá Preysler que no tiene ni idea porque siempre ha sido ella la que ha dejado a sus parejas, eso es mu fuerte, tía, mu fuerte . Menos mal que tienes a tu familia eucarística en México que te ha apoyado y la virgen te está aconsejando porque ella también tuvo un desliz con un maromo, perdón, quería decir palomo. Tú no te preocupes, chiquilla, que en España la gran mayoría de las mujeres " somos Tamara "

Me he vuelto mala

 

Dicen que hay que perdonar y olvidar, pues yo si perdono no olvido y la mayoría de las veces ni perdono ni olvido. A mí tanta santidad me da sarpullido. Seré mala persona pero tanto buenismo no va conmigo. Cojo al mundo por los huevos y lo revoloteo hasta la nube de Oort y allí se las ventile como quiera o pueda. Tantos años siendo buena persona para nada porque al primer NO que dices ya te tachan de egoísta e insolidaria. Yo he consentido muchos abusos y ya me veo mayor para que me tomen por tonta. Sí, por tonta, porque si te ven buena, te dicen tonta, consentidora o blanda y ahí que se te suben a la chepa o te ponen la bota en el cuello. Así que a partir de ahora cuidaíto conmigo que ya no soy Caperucita, soy el lobo feroz y muy feroz.

¿ Os lo habéis creído?. Naaaaaaa. Sigo siendo la misma tonta de siempre

El mar

 

Hoy te he vuelto a ver después de mucho tiempo. Estabas brillante y calmo, sinuoso con ese ir y venir de quien se acerca y ya empieza a irse. Tú azul denso como si el cielo hubiera cambiado de lugar. Te necesitaba pero así, como estabas hoy, sin gente que te importuna, sin agobios, todo limpio para acogerme en tus brazos. Te he visto y he sentido tú olor a nunca y a siempre, a no me dejes, a por qué no vienes, a muchos momentos que pasamos juntos, antes, en otros tiempos, cuando tú eras mi hombro en el que llorar. No volveré a dejarte solo nunca más.

Tú

 

El amor de mi vida no fu el primero, ni el segundo, ni el tercero... Llegó en la madurez y en circunstancias especiales. Llegó cuando tenía que llegar, ni un minuto antes ni después. Justo cuando las frutas de temporada estaban jugosas y listas para ser saboreadas. Ese amor se mantiene durante años porque se cuida día a día, no se mancha con la mentira ni con la deslealtad. Se abona tanto con caricias como con conversaciones. No hay ningún rincón que no se cuide y de vez en cuando, cuando los nubarrones se acercan y la tormenta arrecia, ese amor busca cualquier lugar donde refugiarse. Yo le presto mi paraguas y el me ofrece su abrigo. Juntos podemos con todo. No importa que el amor verdadero no sea el primero lo importante es que sea el último.